En el momento en que llega el tan penoso procedimiento de la ejecución de la hipoteca, es cuando surge la pregunta si con una hipoteca se aumenta o disminuye el valor de un bien, sea esta una vivienda, una finca, etc. Luego del impago de 6, 10 o más cuotas es cuando el banco ha iniciado los trámites para la ejecución hipotecaria, y el deudor con la esperanza de obtener un respaldo, acude a las vías de la justicia para lograr un acuerdo.
Sin embargo, siempre la decisión del juez no es otra que otorgar un plazo, de escasos días por cierto, para pagar al banco lo que has dejado de pagar más los intereses que ha generado la demora.
La subasta del bien
Cuando ha transcurrido ese plazo fijado y no se ha pagado la deuda, comienza el avance de la ejecución de la hipoteca que desembocará en la fijación de la subasta del bien que ha sido hipotecado. Es en ese momento cuando se evidencia que tu casa ha perdido valor con la hipoteca, pues el banco la valoró por un precio y en la subasta este precio disminuye notablemente, a veces hasta un 50% menos del valor fijado en la tasación.
Ejemplos de ello los hay por miles, en casos en que el valor de un inmueble tasado por el banco al momento de la constitución de la hipoteca, era de 200 mil euros, al momento de la ejecución de la hipoteca y para la subasta del bien, su precio cae vertiginosamente hasta 130 mil euros. El mismo banco ha desvalorizado tu vivienda, con la excusa de poder asegurarse la venta del inmueble y recuperar el monto que ha prestado.
A tener en cuenta
Sin embargo, esa desvalorización trae consigo otro problema que lejos de solventar la situación de impago, lo que hace es que el deudor, aun habiendo perdido el bien hipotecado le sigue debiendo al banco porque el desvalorizado precio al que se subastó no cubre la deuda, y continúa el procedimiento por el que la entidad bancaria reclama el embargo de otros bienes del deudor para poder pagar la deuda contraída con la hipoteca.
En resumidas cuenta, el valor de un bien que ha sido puesto como garantía de pago termina disminuyendo con una hipoteca cuando el inmueble sale a subasta pública para que el banco pueda recuperar el monto de la deuda.
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