El bebe debe estar controlado por el médico para saber si su desarrollo es normal. El indicará los cuidados que deben tornarse en caso de que su talla, peso y funcionamiento de los órganos presenten algunas dificultades. La madre ayudará al médico anotando las observaciones que haya hecho e indicándolas a tiempo.
Se llamará sin demora al facultativo en caso de fiebre, deposiciones malas e indigestión. En caso de enfermedades congénitas, el niño estará siempre bajo la observación del especialista.
La madre debe aprender a reconocer cuando el niño comienza a enfermar. Los síntomas son: depresión, inactividad, deposiciones de mal aspecto. El bebe de meses tiene un llanto característico cuando está enfermo, estira sus piernecitas y las flexiona retorciéndose.
Síntomas de enfermedades más frecuentes.- Cómo aliviarlas:
- Diarrea.- Es común en la estación de verano. Conviene dar menos alimentos a los niñitos en ese tiempo. Pero cuando aparece la diarrea es preciso consultar ad médico porque puede ser síntoma de otra enfermedad más seria como la disenteria.
En caso de diarrea se dará mucho líquido al bebe para que no se deshidrate, ya que mediante la enfermedad mencionada pierde todo el líquido de su organismo. La diarrea de los bebes puede degenerar en toxicosis, grave infección que requiere atención inmediata. - Estreñimiento.- Para evitarlo, se acostumbrará al niñito a hacer evacuar su estómago regularmente, llevándolo al reservado a una hora fija cada día. Cuando se presenta el estreñimiento se le dará muchos jugos y frutas, cocimientos de avena; todo lo cual tiende a soltar el estómago. A los grandecitos se les da un purgante suave como leche de magnesia, pero tratándose de bebes no son indicados, débese consultar al médico.
- Cólicos: Los bebes recién nacidos tienen muchas veces cólicos debido a que ingieren aire junto con su alimento, por ello es preciso hacerles votar un eructo a media mamadera y otro al final de la misma.
Otras veces los cólicos provienen de haber tomada la mamadera muy rápidamente, de desorden en las horas para alimentarse y también por enfriamientos debidos a pañales mojados o a falta de ropa adecuada. - Vómitos.- Aparecen cuando toma su mamadera muy , ligero, cuando se lo mueve después de haberlo alimentado, o se le ha obligado a ingerir demasiada cantidad de teche. En general todo bebe vota el exceso de mamadera. El fajero muy apretado es también causante de los vómitos porque reduce la capacidad del estómago y en estas condiciones el bebe no puede tomar la cantidad de leche que le correspondería.
Los vómitos persistentes son índice de enfermedad, en cuyo caso es preciso consultar al médico. - Escaldaduras en las nalgas.- Aparecen cuando el bebe no está bien aseado, por eso cada vez que se moja es preciso lavarlo con un algodoncito humedecido o con la parte del pañal que queda limpia. Enseguida se lo talquea. Si el niño está escaldado se tendrá a mano un frasco con agua de bicarbonato para lavarlo. Sin embargo, cuando el bebe está sano, no es preciso cambiarle el pañal a cada momento, basta con hacerlo cada cuatro horas antes de su alimento.
- Resfríos.- Mientras no haya fiebre, se continuará dando al niño su alimento usual, aumentando la cantidad de agua en la mamadera. Pero si aparece la fiebre, debe consultarse al médico para evitar complicaciones como bronquitis, bronconeumonía, etc. No es aconsejable dar antibiótícos a los niños para curar resfríos pequeños porque ya está comprobada que cuando el organismo se acostumbra a ellos, después ya no reacciona ante los mismos antibióticos y si se presentara una enfermedad seria no surtirían ya efecto.
Relación de las enfermedades con el desarrollo del niño.- Las enfermedades graves, infecciones, diarreas repetidas, parásitos intestinales influyen negativamente sobre el desarrollo del niño. Se sabe por ejemplo que gran parte de las tuberculosis que aparecen en la adolescencia tuvieron su origen entre los 2, 3 y 4 años. De allí la importancia de las vacunas bien dadas a los pequeños. La lesión que deja la conjuntivitis infecciosa en los pequeñitos recien se nota en la adolescencia. La primera crisis de paludismo que puede durar toda la vida, si no se la cura a tiempo, tiene lugar en la primera infancia.
Las enfermedades degenerativas que sufren las personas maduras entre los 40 y 50 años tienen sus comienzos en la infancia, por ejemplo una pequeña malformación articular no bien tratada. El caso más común es 1a luxación de la cadera que puede llevar aún a la invalidez y debe ser tratada al mes de nacida la criatura.
Antes se dejaba a los niños sordos y a los ciegos con su familia hasta la edad de seis años, edad en que los ponian en establecimientos especiales. Funesto error porque tal reeducación es muy difícil y costosa. Actualmente la tendencia es a despistar todas las enfermedades, sean motrices, sensoriales o síquicas, lo más pronto posible para equipar al niño con aparatos, técnicos o métodos reeducativos que le permitan relacionarse con el mundo exterior y comunicarse con los demás. El niño debe aprender a hablar, a ver, a moverse, a orientarse en el mundo exterior cuanto antes para que su desarrollo no se perjudique.
Vacunas.- Están hechas a base de gérmenes muertos o debilitados que producen en el organismo formaciones de anticuerpos para defensa en el futuro, de enfermedades producidas por bacterias de ese tipo.
Es preciso vacunar a los niños contra las más frecuentes epidemias en nuestro medio, tales: tifoidea, viruela, tétano, tos convulsiva, difteria. La vacuna contra la parálisis infantil o poliomielitis es igualmente importante, y la de la tuberculosis en los medios más expuestos a esa enfermedad.