Nuestra piel está cambiando continuamente aunque no lo notemos, y la piel del rostro es una de las más delicadas que recubre nuestro cuerpo.
Sigue esta sencilla receta de un exfoliante natural que te permitirá una exfoliación rápida y mantener tu cutis hermoso y fresco como siempre.
Para esta mascarilla necesitas:
- Una toalla limpia para tu rostro.
- Agua tibia.
- 2 cucharadas de azúcar
- Jabón de glicerina, en barra o líquido.
- Un cubo de de hielo.
Para comenzar ten a la mano la toalla y el azúcar en un envase. Si el jabón es liquido, debes aplicarlo al azúcar hasta que tengas una mezcla con una textura suave y apta para la aplicación.
De otro modo si tu jabón es en barra, moja tu cara con abundante agua y frota el cutis con el jabón hasta obtener espuma, toma poco a poco azúcar y comienza a hacer masajes en forma circular.
Comienza por los pómulos, luego dirígete hacia la nariz, baja a la barbilla y luego la frente y las sienes. De esta manera estarás removiendo todas las células muertas a la vez que relajas los músculos de tu cara.
Retira el jabón con agua abundante agua tibia, y luego seca con la toalla.
Toma el cubo de hielo y pásalo por tu cara delicadamente. Esto hará que los poros dilatados se cierren y obtengas una piel tersa y suave.
Un exfoliante natural, fácil de usar y ecológico, ¿podrías pedir más?
Vía imagen: Skin treatments