-¿Qué es y en qué consiste?: La depilación por láser se puede realizar sobre cualquier cuerpo con la pretensión de destruir selectivamente las células que hacen crecer al pelo, sin dañar los tejidos, es decir, sin hacer quemaduras sobre la piel y no producir cambios en los pigmentos). La descarga del láser emite en una longitud de onda que es absorbida por la melanina (pigmento presente en todo tipo de pelo), que se calienta hasta producir la destrucción de la matriz y el folículo piloso, con lo cual en ese punto no volverá a crecer el vello.
-Sesiones: La depilación completa de la zona se puede conseguir en cuatro sesiones, aunque puede variar según el tipo de piel, de pelo y la zona a tratar, pudiendo necesitar alguna más. La duración de la sesión dependerá de la zona que se trate. Las sesiones se separan en períodos de 3 ó 4 semanas. Las zonas más comunes a depilar son la ingles y las axilas que suelen precisar unas cuatro sesiones, con un precio aproximado de 400 euros, aunque varía mucho dependiendo de la zona y de las sesiones necesarias.
-Datos de interés: Antes de someterte al tratamiento recuerda que debes dejar crecer el pelo lo suficiente y no deberás acudir a la sesión con la piel bronceada o después de haber recibido rayos UVA. No tiene efectos secundarios; tan sólo en casos extremos pueden aparecer pequeñas manchas o quemaduras. Los resultados son de un 90-95% de éxito.