Según el diario canadiense National Post, el desarrollo del feto puede verse perjudicado si la gestante vive con altos niveles de tensión nerviosa. Pathik Wadhwa, dela Facultad de Medicina de la Universidad de Kentucky, de Lexington (Kentucky, E.U.A.), señala que el medio uterino “condiciona el crecimiento de la criatura, que puede resultar predispuesta a las enfermedades a consecuencia de las presiones excesivas que sufra la madre”.
El informe indica que es “más probable” que las madres abrumadas “den a luz prematuramente”. Varios investigadores dela Universidad de Clemson (Carolina del Sur, E.U.A.) afirman que “los ejercicios de relajación pueden ayudar a reducir la presión arterial de las embarazadas tensas y favorecer así un ambiente uterino más saludable”.