Para olvidarse del traje comodín de corte sastre que se suele usar durante las largas horas de trabajo, nada mejor que sumarse al estilo sofisticado, creativo y práctico que exige el mercado laboral de hoy.
Entre las tendencias de la moda 2008, se encuentran los trajes clásicos (de saco y pantalón), pero con toques de color y estilo en las blusas y el tamaño de los bolsos de mano. Los sacones con estampados psicodélicos en tonos contrastantes. Los leggins o los pantalones chupín (ajustados en los tobillos) con un largo suéter y un collar llamativo. Los mini-vestidos con sacos cortos en animal print e incluso botas de caña corta.
Por otro lado, lo último es llevar una mezcla de texturas, combinando vestidos, faldas o pantalones de telas delicadas con sacos de telas más fuertes, como el cuero o el jean, y viceversa.
La moda actual impone además, la tendencia al estilo masculino, tanto en camisas con estampados a cuadros, pantalones rectos, sacos y chalecos, pero siempre con el toque femenino y divertido.
Lo importante al momento de elegir las prendas que vamos a usar, es confortabilidad y funcionalidad que facilitan la vida urbana tanto en el ámbito laboral como en la vida cotidiana. Para ello, se puede optar por un conjunto de prendas básicas que tengan el encanto de lo masculino y lo casual; y combinarlas con las más novedosas blusas, collares largos y grandes carteras del momento.