Lo bueno que tiene cambiar la hora es que o bien dormimos un rato más o el día se nos hace más corto, pero da mucha pereza coger el reloj y atrasarlo o adelantarlo según corresponda. Sobre todo si es un reloj digital y no tienes las instrucciones a mano, entonces te vuelves loco dándole a todos los botoncitos que incorpora tu modelo y te frustras al ver que sólo consigues poner el cronómetro y la luz.
Ora iLegale pretende ser un reloj que acabe con la desgana de cambiar la hora. Su diseño hace que sea tan simple que desearás que el informativista de turno diga que es momento de ajustar la hora cada dos por tres. Con un divertido empujón gracias a sus muescas, tu Ora iLegale pasará de un horario a otro sin mayor problema.
Fácil, ¿eh? La idea es de Dennis Guidone. Más información aquí.